¡Bien Dicho! vuelve al colegio a hacer deberes y aprender palabras aragonesas relacionadas con la escuela.
María de Miguel “esbarrucha” a los alumnos de un aula con mucha historia en Lacorvilla (Zaragoza), donde se ha jugado durante muchos años al “chinchabarrico”. En Monzón (Huesca), un alumno de la escuela de tractores esparce “fiemo” sin encallar en el “bardo”, y aprueba el examen bajo la supervisión de María. Además, visita una escuela de adultos nada “jautos” de Zuera, en donde activan la memoria para no “acoflarse”. Allí María pasará un examen de palabras aragonesas.
Mientras tanto, Federico Contín visita Villanueva de Gállego (Zaragoza) para presenciar una clase de “repatán” con un “can de chira”. Para terminar, María asiste a una clase de una escuela rural en Gea de Albarracín (Teruel), donde aprende lo importante que es “escoscarse” sin “embozar” el baño para poder merendar y coger fuerzas para el resto de la clase.